Minecraft, el juego de bloques crafteables y mundos pixelados mas famoso del mundo, fue creado por Markus Persson, alias Notch, en su tiempo libre, mientras trabajaba en un juego llamado Infiniminer. Este juego se centraba en minar y conseguir recursos en un modo de competencia entre dos equipos, el rojo y el azul. En este momento Infiniminer es un juego de código abierto y si quieres probarlo de te dejo el link en la descripción.
Notch quería hacer algo más con esa idea. Soñaba con hacer un sandbox, es decir, un juego de mundo abiertos que permitieran a los jugadores explorar a su antojo. Un diez de mayo empezó a trabajar en su idea y seis días después, salió la primera demo de Minecraft, el 16 de mayo de 2009.
Minecraft fue lanzado como propiedad de Mojahn Studio, la empresa de Notch, y pronto empezó a ganar adeptos por sus mecánicas fáciles y las múltiples posibilidades que presentaba a los jugadores, y como ha pasado muchas otras veces, pronto este proyecto empezó a sobrepasar los limites de su creador
El agotamiento que este proyecto causaba a Notch permitió que Microsoft adquiriera los derechos del juego, y desde entonces no ha parado de desarrollar nuevos mobs, biomas, estructuras mecánicas. Minecraft está muy lejos de ser un proyecto muerto. Cada año se suman nuevos jugadores, y los veteranos siempre estamos esperando las nuevas cosas que este mundo nos ofrece.
Lo maravilloso de Minecraft es que aquí no tenemos una historia que seguir. No hay princesas que rescatar, carreras que ganar o enemigos terribles que vencer antes de que dominen el mundo. Cada uno puede jugar a su tiempo y a su manera. Algunos parten a hacer una casa con madera y otros deciden que un hueco en la tierra es suficiente. Y esta bien. Esa es la magia del juego. Tienes muchas decisiones que tomar y no hay respuestas incorrectas, no hay finales malos. Hay días que tenemos ganas de jugara a la granja y nos ponemos a cuidar de borregos, vacas, cerdos y pollos. Luego soñamos con una villa con aldeanos que de alguna manera nos hagan compañía, y que de paso nos ayuden en nuestra ventura con tradeos convenientes. Y sii al día siguiente quieres ponerle su mejor armadura a tu caballo mas veloz y recorrer el mundo en busca de nuevos biomas, animales o estructuras, puedes hacerlo. Si ya te cansas te de explorar y de jugar a ser el alcalde de una ciudad y ahora quieres un reto más allá de matar débiles zombis y esqueletos mal armados, puedes ir tras la dragóna, el wither o el warden. Pero, mi amigo esto no te hace ni el héroe ni el salvador, pues debes tener en cuenta que, la dragona está en su propia isla sin hacerle daño a nadie, que el Wither es un ser que necesita ser invocado, y que el warden solo está protegiendo su bioma y si acaso una ciudad antigua, así que no eres el bueno de la historia, más bien eres el villano invasor que va a matarlos por puro gusto y disfrute, porque ellos no estan haciendo nada malo y tu llegaste con toda la intencion de ver el el mundo arder
Y no imposta cuantas veces inicies una nueva partida en Minecraft, ninguna va a ser igual a otra. Todas las partidas de Minecraft se generan a través de una semilla, y el número de semillas es tan grande y las opciones tan variables que ninguna de tus partidas serán iguales. Un día puedes empezar en un desierto sin recursos ni nada útil cercano y otro día en una aldea abandonada con el Warden en sus cimientos.
Y aquí es cuando caemos en la cuenta de que Minecraft es un isekai y por eso nos gusta tanto. Tu personaje no pertenece a ese mundo, simplemente apareció en un universo cualquiera donde tú no perteneces a ningún lado, no tienes familia, casa u origen. No eres un aldeano; eso es obvio tu eres eres diferente a esos simpáticos seres carentes de género y muy hábiles para el comercio. Es cierto que hay leyendas en torneo a ellos y las antiguas civilizaciones que ahí existieron, pero nadie nos dice que tu eres parte de eso ni ahora, ni antes. En este juego nadie espera que hagas tareas absurdas, lleves recados o pagues por tu vivienda. Es mas, hasta podríamos pensar que el mundo estaría mejor sin ti modificándolos biomas, matando animales y esclavizando aldeanos. Pero, exactamente ahí esta lo divertido, aquí tu eres un Dios, tu puedes decidir que hacer ya nadie te lo va impedir. Poco a poco vas a ir mejorando tu vivienda , tus armaduras y venciendo tus limitaciones con encantamientos y pociones mientras sigues haciendo tu voluntad.
Podrás crear portales para viajar entre dimensiones, navegar grandes océanos y cruzar selvas llenas de peligros. Si dominas la piedra rojiza, podrás crear mecanismos avanzados con puertas lógicas dignos de cualquier proyecto de ingeniería de universidad. En el modo creativo, encontrarás todos los materiales, elementos, texturas y formas que necesitas para llevar a cabo tus fantasías arquitectónicas más descabelladas y sin correr ningún riesgo y sin perder tiempo consiguiendo los materiales.
Juegues como juegues, al final del día, y aunque el mundo sea todo tuyo siempre estas solo. A menos que lleguen otros jugar contigo, y ahí es donde Minecraft obtiene su mayor Re jugabilidad, cuando decides compartes esta aventura con tus amigos y familiares.
Aquí siempre tendrás un proyecto que construir, algo nuevo que buscar cosas lejanas que explorar, o un ser temible que derrotar. Por eso es mi videojuego favorito, porque se adapta perfectamente a mis necesidades, mis tiempos y mi humor. Si aún no lo conoces, aprovecha que está disponible para las principales consolas, para PC y para dispositivos móviles.