El hype ha terminado. El capul está de vuelta y el cuartel de las feas también. Después de 25 largos años, por fin tenemos otra vez la historia de Betty, la fea. En estos 25 años han pasado muchas cosas y el primer capítulo es el clásico ejemplo de info dumping mal manejado. Hay muchos diálogos que solo sirven para ponernos en contexto y, aun así, hay cosas que no me quedan muy claras. Pero por los avances sabemos que nos faltan muchos flashbacks, como el de los 15 años de Camila.
Cambios y Continuidades
Hay cosas que se veían venir, o al menos que eran esperadas, como el divorcio de Armando y Betty. Lo que hace 25 años nos vendieron como una historia de amor no era tal. Armando, claro que tenía sentimientos por Betty, siendo esta la única que lo apoyaba incondicionalmente. Ni sus padres, principalmente Don Roberto, ni Marcela, aun siendo su prometida, le tenían tal devoción. Al contrario, desde el primer capítulo dejaron muy en claro lo poco que confiaban en él. Betty, por otra parte, se dejó deslumbrar por el ejecutivo de dinero y guapo que la defendía y que en un primer momento la prefirió ante una bonita. Ellos tenían una relación muy codependiente y destinada al fracaso desde la estratagema de Armando para seducirla. Armando es un hombre que engañó a Marcela muchas veces y esto le consta a Betty. ¿Cómo no va a desconfiar de él a la menor oportunidad si ella misma sabe de lo que es capaz?
Desde la salida de la novela, hubo muchas teorías interesantes, como que Nicolás era en verdad el hijo perdido de Hermes. A esta aún le tengo fe de que sea cierta. De todas formas, él y Betty son como hermanos y me da mucho gusto ver que su relación sigue en pie y ver que todavía se tienen la confianza de decirse las cosas de frente, como cuando Nicolás le dice a Betty que ella le robó el novio a Marcela. Pero otra de las teorías que había agarrado mucha fuerza es que Sandra y Mariana eran novias. Aunque Mariana no regresó en esta temporada, Sandra sí lo hizo y salió del clóset.
Lo que Nos Deja con Dudas
Falta que nos expliquen mucho de cómo es que Marcela y Patricia regresaron y cómo es que Patricia se convirtió en jefe de personal. Lo que sí se nota es que hay menos relleno y menos fidelidad a la realidad. Me refiero a que ahora trabajan menos que antes. Al menos los veíamos haciendo papeleo, ahora se nota más que los empleados están más por el chisme, con razón la empresa va tan mal.
Uno de los nuevos personajes, Ignacio, se ha presentado como pariente de Marcela, como cercano a la familia Valencia. Díganme que no soy la única que cree que es el hijo perdido de Daniel y que por eso Marcela lo cuida tanto, si es lo único que le queda de su difunto hermano. Esta subtrama de Daniel muriendo en la cárcel no me la esperaba y no me gusta. Resulta que Betty lo denunció sin saber que era él. Esto no quedó muy explicado, pero muere en la cárcel. Lo que hicieron Betty y Armando también fue muy grave y ninguno de ellos pisó la cárcel.
Relaciones Rotas y Nuevos Comienzos
Otra cosa que me sorprendió es la cantidad de muertes y divorcios. La relación de Freddy y Aura María tampoco funcionó. Según dijo la actriz, Aura María está pasando por muchas cosas. Berta es viuda o divorciada, no sé, lo que sí sé es que el actor que encarnaba a su esposo murió, igual que las actrices de Inés y doña Catalina. Pero, hombre, matar a doña Julia sí fue un abuso. A Margarita no, ella nunca entendió nada y nosotros nunca la entendimos a ella.
El cambio de look de Betty tiene todo el sentido del mundo. Su aspecto era casi una calca de Marcela. Pasó muchos años viviendo para otros, luciendo para otros, y ahora quiere reencontrarse, ser la misma Betty de siempre, la Betty que ella es, pero más madura y dispuesta a decir no.
En su tiempo, Mariana y sus cartas del Tarot tenían un propósito. Sus predicciones desencadenaban acontecimientos, casi como profecías autocumplidas. Eso lo vimos en el video del Mito de Casandra, pero aquí que Berta ande de astróloga, ya que ella predijo que le ofrecerían a Betty la presidencia, se me hizo un refrito mal hecho de una subtrama magistralmente utilizada por Fernando Gaitán.
En resumen, y después de repasar mis seis semestres en la San Marino puedo decir que Betty la fea, la historia continua esta superando mis expectativas, las que les aseguro no eran muchas. La novela no intenta endulzar las cosas, ni repetir la misma formula, mas bien nos muestra como podemos volver a cometer los mismos errores ycomo es que los fantasmas del pasado siempre nos persiguen.
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